Wabi-Sabi

«Wabi-sabi» es un término japonés; Wabi hace referencia a vivir con humildad y simplicidad, al mismo tiempo que a conectar con la naturaleza; mientras que Sabi tiene que ver con aceptar el ciclo natural de las cosas y descubrir que en esa naturalidad reside la belleza.

– La naturaleza es perfecta, aunque está llena de imperfecciones –

侘 寂

Wabi se deriva de la raíz wa, que se refiere a la armonía, la paz, la tranquilidad y el equilibrio. El espiritu Zen se personifica en una persona Wabi, es decir, que se conforma con muy poco, está libre de codicia, de indolencia, de ira, y comprende la sabiduría de la naturaleza.

Sabi, por su parte significa “la flor de tiempo”. Implica la progresión natural del tiempo, la decadencia, la degradación, el brillo apagado de lo que una vez fue esplendoroso. Significa entender que la belleza es efímera.

Así que por una parte tenemos wabi, que significa armonía y equilibrio, y por otra, sabi, que es lo decadente, lo degradado, oxidado, y juntos hacen referencia a la belleza de lo imperfecto, de lo defectuoso o lo inacabado.

La filosofía Wabi Sabi aboga por decir adiós al perfeccionismo y aprender a apreciar el paso del tiempo y la belleza de las cosas incompletas, un concepto japonés que nos propone una forma más auténtica de saborear la vida.

Amaia Arrazola, autora del libro ‘Wabi Sabi’ (Ed. Lunwerg, 2018), explica este término como la belleza de las cosas imperfectas, modestas y humildes, no convencionales. 

El Wabi Sabi es un concepto elaborado directamente de la filosofía budista Zen, basada en la contemplación de la naturaleza y la aceptación de su continuo ciclo de nacimiento, crecimiento, decadencia y muerte.